26 ago 2025

Las "maravillas" de ASTE NAGUSIA, la gran fiesta de Bilbao

 


¿Qué ventajas aporta a la ciudad el modelo de Fiestas que ha implantado la antigua Coordinadora de comparsas de Bilbao, ahora Federación Bilboko Kompartsak?


Por: Javier Larrea

Analista Social

 

Esta Federación de comparsas, con el consentimiento (e incluso complacencia) del Ayuntamiento de Bilbao y su Área de Cultura, se ha apropiado de un recinto público “El Arenal” otorgando de facto permisos de ocupación sobre quienes sí, y quienes no, pueden colocar una tzosna en dicho recinto. Además de esta apropiación indebida de un espacio público, con la inacción y pasividad municipal, se han auto arrogado la función de garantes de la seguridad pública afirmando que los policías no son bienvenidos en el recinto y publicitando que si alguien tiene algo que denunciar en ese espacio autárquico lo haga a través de las barras de las tzosnas. ¡ALUCINANTE!

Y todo esto con la connivencia o silencio de las autoridades municipales y autonómicas que están sometidas el imperio de las kompartsas desatendiendo a los vecinos.

 

Se supone que este modelo festivo se trata de un caso de éxito en la organización de festejos populares y de hecho parece que lo quieren postular para que sea declarado Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.

 

Repasemos cuáles son las ventajas, bondades y beneficios para nuestra sociedad de este arquetipo o patrón festivo. Veamos en orden todo los que aporta a Bilbao y a los visitantes de este especial recinto festivo.

-             Un sistema festivo basado en el consumo de alcohol (y drogas) sin ningún control sobre su consumo por parte de menores de edad.

-             Aglomeraciones de personas por encima de densidades que no deberían ser permitidas y que deberían ser controladas por las autoridades municipales. No se deberían permitir concentraciones superiores a dos personas por metro cuadrado limitándose los aforos que superen esta densidad.

-             Ocupación por parte de manteros y vendedores ambulantes de los espacios de tránsito que reducen y vulneran las condiciones de seguridad en caso de una necesaria evacuación o impidiendo el acceso de los vehículos de emergencia de los servicios públicos.

-             Politización del espacio festivo y de las fiestas con logotipos, fotos y carteles y propaganda política. Todo espacio festivo debería quedar al margen de las ideologías de los partidos políticos, pero no es así.

-             Aumento desmesurado de puestos de venta de bebidas y comidas sin control higiénico sanitario de las condiciones de conservación de bebidas y alimentos. Descontrol absoluto de puestos ambulantes de preparación y elaboración de comida sin ningún control sanitario. 

-             Infracción de las normas elementales de higiene alimentaria colocando en las tzosnas a personas dispensando bebidas y alimentos sin la formación ni experiencia adecuada.

-             Ruidos permanentes a altas horas de la noche, y ruidos por encima de los decibelios que permitan el descanso de los vecinos residentes.

-             Suciedad generalizada, plásticos y vidrios por el suelo.

-             Comportamientos incívicos de las personas asistentes orinando fuera de los wáteres públicos instalados.

-             Malos olores en las zonas de alrededor de las choznas durante todo el periodo festivo.

-             Gastos extraordinarios de limpieza a cargo de los contribuyentes. En los espacios privados de hostelería sus propietarios tienen que correr con los gastos de limpieza mientras que en la zona de tzosnas como espacio público lo pagamos todos.

-             Negocio hostelero libre de impuestos o sin control fiscal. ¿Acaso dan ticket en las tzosnas? Recaudación opaca que estimula el fraude fiscal. Al contrario de lo que se nos aplica a todos los vizcainos. Esto corresponde a la Diputación.

-             Infinidad de manteros descontrolados (fruto de la trata de personas de las mafias que se dedican a la explotación de personas en situación irregular) que aterrizan en Bilbao para la venta ilegal de productos de consumo falsificados. Esto supone el consentimiento de una competencia desleal a los comerciantes de la villa. También sin control fiscal.

-             Elevada concentración de carteristas y malhechores que elevan la criminalidad de Bilbao a cifras récord.

 

Y lo mejor de todo (ironía) es el orgullo de la corporación municipal sobre este atípico modelo festivo, por lo cual no es de extrañar que sea el propio Ayuntamiento quien proponga la candidatura de Patrimonio Inmaterial.

 

Balance

Hasta un medio de comunicación importante se ha hecho eco de la pérdida de calidad cultural de las fiestas de Bilbao. A todo esto, ¿Qué piensan los otros partidos políticos del consistorio de todo esto? ¡Ah, que están de vacaciones!

 

Según los datos publicados hoy en las fiestas de Bilbao han participado un millón y medio de personas, pero ojo, 900.000 en los fuegos artificiales, 200.00 en conciertos y 90.000 en el Txikigune, así que numéricamente ya se aprecia que hay vida más allá de las tzosnas.

 

Las preguntas para las próximas ediciones son:

-        ¿Otro modelo de fiestas es posible?

-        ¿Podrá el Ayuntamiento recuperar la autoridad que le corresponde y poner orden y programar la Aste Nagusia que quieren los bilbainos y no la que impongan desde Bilboko Kompartsak a la Comisión de Fiestas?

 

No lo creo. Si quienes dirigen los designios de la vecindad bilbaina opina que todo lo han hecho bien es que no tienen ningún propósito de la enmienda.

1 comentario:

Sanitario dijo...

Totalmente de acuerdo Javier Pero te falta el delito contra la salud pública que cometen los que venden comida ambulante sin control alguno y la administración competente que no lo impide